MEMORÁNDUM

***Algo bueno se está haciendo.

Gerardo Ruano Cástulo

En la antesala de la semana santa, es magnífica noticia que el tianguis turístico haya sido todo un éxito. Que la organización haya cumplido con las expectativas. Y que las condiciones hayan impactado de forma positiva en citas de negocios y contrato de servicios.

Podemos aducir, en virtud de los resultados, que el gobierno Astudillista se salió con la suya, en el reto de hacer la mejor versión del tianguis de la historia. Lo que no podía ser de otra manera, cuando los esfuerzos de los últimos tres años, han dejado en claro, que el turismo es prioridad para el Gobernador, Héctor Astudillo Flores.

Hay algo o mucho que se está haciendo bien, para que las inversiones sigan llegando a Guerrero; y en especial, al puerto de Acapulco. Algo debe estar haciéndose bien, cuando los eventos de gran talla siguen siendo la constante.

Algo está sucediendo para que el mismo presidente del país, le haya tomado cariño al puerto de Acapulco. Estuvo en la Convención Bancaria. También en evento, poniendo en marcha programa social. Y lo más reciente, en la inauguración del tianguis turístico. Algo bueno pasa y tiene mucho que ver con quién hoy gobierna a Guerrero.

Por alguna razón, termina el tianguis y el banderazo oficial del operativo nacional de seguridad, en el marco de semana santa, también tuvo como sede Acapulco. Lo que envía, sin duda, mensaje positivo para los miles y miles de visitantes que se esperan por estas tierras del sur.

Asi las cosas con el turismo, donde el Gobierno Astudillista, sigue generando saldo positivo en inversión. En generación de empleo. En derrama económica. Rebasando las expectativas, ante el escenario gris de 2015, cuando recibió un estado en terapia intensiva.

Existen mucho más rubros, donde las cosas se están haciendo bien. El tema es, que también debiera existir corresponsabilidad de todos los actores políticos y sociales. En especial, los que siguen empecinados en violentar los derechos de terceros, como medio de presión, para satisfacer sus intereses. Afectando con ello, a la misma economía del estado.

¿Si las cosas se están haciendo bien, debiera haber reciprocidad? Solamente pregunto. Esa es la cuestión.