DE BURROS, AVIONES Y OTROS MALES...

Había una vez un leñador que usaba un burro para transportar su leña, así que prácticamente gracias al animal obtenía su sustento, de repente sin más se murió el burro, el hombre lloraba desconsolado porque había perdido su modo de vida.

Pasó otro hombre por ahí y, viendo su angustia, le preguntó: ¿Cuánto necesitas para comprar otro burro?, el leñador le contestó: 1000 pesos
-No te preocupes, yo voy a hacer que recuperes tu burro, sólo préstame su cadáver.
El leñador, aunque desconcertado, le dio el cadáver.
El hombre se puso a rifar 100 boletos de 50 pesos para ganarse un burro. Al final vendió todos, hizo la rifa, le compró un nuevo burro al leñador y él ganó $3,950 pesos.
El leñador preguntó al hombre cómo había hecho para no tener problemas, a pesar de estar el burro muerto, y el hombre le contestó: ¡Muy sencillo!, de los 100 que me compraron boletos sólo le tuve que dar la cara a uno, al que ganó, cuando vio que el burro estaba muerto le dije, ¿te llevas el burro o quieres que te regrese tu dinero? ¡Y de inmediato me aceptó la devolución!
Moraleja: Si tienes un burro muerto (o un avión que no se vende), sólo falta  un puñado de pendejos para sacarle provecho.
...y en México tenemos 30 millones.

1 comentario:

  1. Primero cual es tu nombre porque tiras la piedra y escondes la mano.
    Si somos 125 000000 aproximadamente de mexicanos y nos equivocamos 30000000 entonces vamos bien sancho y cuando lo compraron cuantos millones de mexicanos estuvieron pendejo como tú comprenderás he?

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