Denuncian que el presidente de Tixtla se quiere quedar con dinero de las fiestas religiosas

Por Salomón Flores

Chilpancingo Gro., 18 de Julio de 2010.- Habitantes del barrio del santuario de la ciudad de Tixtla, denunciaron que el presidente municipal Jorge Luis Campos Espíritu junto con sus allegados tratan por todos los medios de imponer a gente incondicional suya, al frente del comité del barrio, “para que de ese modo, no les entregue el recurso que se genera de las fiestas religiosas de mayo Y septiembre”, y con ello, ese dinero pueda tener otro fin, menos de arreglar la plazuela, o en su caso dar respuestas satisfactorias a la población de ese asentamiento.
Es tanta la intervención del alcalde que este fin de semana, mandó a varios de sus funcionarios más cercanos, para hacer una reunión en el barrio del santuario y haciendo uso de su poder político, obtuvo que en la escuela primaria Alberto González Valle, que le abrieran la escuela y e ese modo hacer una reunión con alrededor de 30 personas del barrio, entre las que estaban incluidos mismos funcionarios de la comuna, como el director de gobernación, el ex oficial mayor Ismael Cortes Moisen, y trabajadores de servicios públicos entre otros.
Además se pudo ver las unidades del Ayuntamiento municipal, especialmente la de servicios públicos la cual desde muy temprano andaba acarreando sillas, y mesas, para llevarlas a la escuela primaria “Alberto González Valle”, la cual fue sede para hacer la reunión de los funcionarios de la comuna, para tratar de imponer al nuevo comité que es el alfil del presidente municipal y que entre las propuestas se encontraban Gregorio Dircio, y Jorge Tlatempa, ambos priistas y que presumen tener a mucha gente de su lado.
La reunión que estaba programada a las siete de la noche, empezó con casi una hora de retraso, porque los enviados del presidente no podían reunir a gente para empezar con el cambio del comité, por lo que tuvieron que mandar a Gregorio Dircio a ir a ver a más personas para que hubiera quórum legal, aunque después de casi media hora de búsqueda, solo pudieron reunir a un promedio de 30 personas, entre las que estaban incluidas, funcionarios de segundo nivel y trabajadores del Ayuntamiento.
A esa misma hora, la presidenta del comité del barrio de El Santuario Gloria Aguilar, tenía una reunión con la gente que la respaldaba, y que oscilaban en más de 80 personas. Reunidos a lado del kiosco, lugar que siempre ha sido el punto de referencia para sus reuniones, la presidenta del comité conminó a la gente del barrio y a los mismos comerciantes, a no dejarse intimidar por el alcalde y sus allegados, “porque nosotros no estamos haciendo nada malo, solo estamos pidiendo que el recurso que se genera de las fiestas de mayo, se invierta en la plazuela, y en las necesidades de la población del barrio”, no queremos que se use el recurso para otros lados.
La gente que se encontraba con ella reunida, expresaron que de seguir con la imposición del alcalde Jorge Luis Campos, y de sus allegados, de meter las manos para poner a gente que es de su partido, y que no ha hecho nada por el barrio, “nos vamos a ver en la necesidad, de visitar a los demás compañeros y a nuestras familias, para ir al Ayuntamiento a pedirle al alcalde, que se haga a un lado, y que haga transparente los recursos del barrio”, a ver si con esa manifestación, le da algo de pena y vergüenza, y con ello deja de meterse en algo, que es decisión del barrio, y no del presidente y sus gatos, externaron un tanto molestos los habitantes reunidos.
En la reunión de los funcionarios con los priistas en la escuela Alberto González Valle, se pudo saber que van a levantar actas, y documentos, donde van a pasar a las casas de las personas para que firmen un documento, en donde piden que haya cambio del comité del barrio, y que pongan a otras personas, “y de ese modo ya no salgan cosas en los medios de comunicación”. Este hecho causo la molestia de los comerciantes del barrio y de algunas personas de organizaciones, quienes advirtieron: “si el presidente quiere guerra, vamos a desenmascararlo y a poner pruebas de que está metiendo mano en algo, que no es de su competencia, pero se ve que las ansias por el dinero son muchas, porque se quieren quedar con más de 400 mil pesos por año, por las fiestas religiosas del barrio”.