MEMORÁNDUM

Por Gerardo Ruano Cástulo
*** Mario Moreno; la transformación del centro histórico

Es cierto, la remodelación del centro histórico de Chilpancingo, se registra en el marco del bicentenario del Primer Congreso de Anáhuac. Por eso, la atención estaba centrada en los tiempos de realización, puesto que debe lucir impecable para la ceremonia del próximo 13 de septiembre. Sin embargo, lo que no se debe olvidar, es que significa el emblema de la transformación de la imagen de la capital del estado, bajo la conducción del mejor alcalde de Guerrero, Mario Moreno Arcos. Así es.
Chilpancingo estará listo para celebrar los doscientos años de la lectura de los sentimientos de la nación. El presidente municipal ha anunciado que los trabajos transcurren a buen ritmo, y que el centro de la ciudad lucirá su nueva imagen, a partir de esa fecha importante para la historia del país. No habrá retrasos en la entrega de la obra, como deseaban quienes solamente critican y no aportan nada. En breve, los capitalinos disfrutarán de un zócalo digno de una capital.
No hay duda, que la nueva imagen dará un tono especial a los festejos del bicentenario. Como tampoco la debe de haber, con relación a lo que representa y significa ésta obra para Chilpancingo. No se trata de una simple obra conmemorativa. Mucho menos de un esfuerzo aislado. Sino de una de las piezas más importantes, de la transformación y embellecimiento, que hoy se trabaja en la capital de Guerrero.
Sería mezquino olvidar la ruta que decidió tomar el alcalde capitalino, Mario Moreno Arcos. El ve un Chilpancingo que tiene la capacidad y potencial de convertirse en una capital más digna. Con una imagen embellecida y que sea del gusto y orgullo de la gente. Se salió del esquema monótono de las administraciones municipales. La innovación, por cierto, es hoy una de sus más fuertes cartas de presentación y que lo acreditan como un político con visión, talento y experiencia. Ese rasgo distintivo, lo ha puesto ya en boca de muchos, que lo ven con buenos ojos para buscar la gubernatura en 2015.
Cuando en septiembre de 2012, tomó de nuevo las riendas del municipio, no se limitó a cumplir solamente con los programas de obras tradicionales. Ni depositó toda su energía en las audiencias públicas, que para su gobierno ya son algo natural. Sino que le apostó a emprender el proceso de transformación de una capital, que estaba etiquetada con mala imagen.
Hacer de Chilpancingo una ciudad diferente, con mejor imagen y más digna de su rango de capital y de sus habitantes, es uno de los más grandes retos que ha emprendido Mario Moreno. Los resultados de este esfuerzo, hoy son reconocidos por miles de capitalinos. 
Se dice en la filosofía del éxito, que éste solamente es para quienes se atreven. Los tibios y mediocres no sirven para buscar el éxito. Los grandes cambios requieren de gente que se atreva. Que esté dispuesta a correr los riesgos y sepa convivir con la presión. En ese sentido, si de algo se puede acusar a Mario Moreno Arcos, en cuanto al proceso de transformación que se ve en Chilpancingo, es que es un político que se atreve. Que le apuesta a la innovación. Que le gusta hacer y ser diferencia.
Por eso, la nueva imagen que lucirá el zócalo capitalino, en el marco del bicentenario, no es una obra aislada o simplemente conmemorativa. Es parte del proceso de transformación y embellecimiento de la ciudad, que hoy encabeza el mejor alcalde de todo Guerrero. Esa es la cuestión.

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