LAS DENTELLADAS

Por El Tiburón

Usted recordará que algunos senadores y diputados federales y locales de Guerrero realizaron una serie de “informes” por región –según dijeron- para rendir cuentas puntualmente sobre su intensa, incansable, talentosa, exitosa y nunca bien remunerada labor “legislativa”. Lo curioso es que ninguno de los políticos que aspiran a la gubernatura de Guerrero quedó fuera de ese tipo de actividades que muchos manejaron y siguen manejando como campañas anticipadas violatorias, por cierto, de la legislación electoral.
Recordarán que lo hiicieron David Jiménez Rumbo y Lázaro Mazón Alonso del “pederré”; lo mismo ocurrió con Héctor Vicario y con Angel Aguirre del RIP; Manuel Añorve, no siendo diputado ha realizado actividades “sospechosas” fuera de su municipio que fueron calificadas también como actividades anticipadas de campaña política. Astudillo fue el aspirante “priyista” a gobernador que menos se movió, seguramente por que él mismo sabe que sus posibilidades de triunfo son prácticamente nulas. Los del PAN no hicieron nada pero no por que quieran respetar la ley; su problema es que no tienen hasta ahora ningún candidato que le quite el sueño al más jodido de sus contrarios “priyistas” y pedorristas… perdón, debe decir pederristas o más bien perredistas.
Por otro lado, voces del mismo interior del “pederré” y del RIP han señalado como “descarada “ la forma como el gobernador de Guerrero, Zeferino Torreblanca, ha venido apoyando la que también han llamado campaña adelantada de Armando Ríos Piter, ahijado consentido de la administración amarillo-azulosa de Guerrero.
Como corresponde al estilo de los políticos mexicanos (ver como ejemplo pleito de viejas entre Nava y Beatriz Paredes) el gobernante de Guerrero ha negado sistemáticamente que haya otorgado tal apoyo aunque todavía traiga las manos oliendo a circo.
Claro que tampoco acepta que su protegido ande haciendo campaña desde ahora, como lo han evidenciado notas periodísticas de reporteros que lo han cachado haciendo proselitismo en los camiones urbanos de algunos municipios y repartiendo billetes del gobierno del estado ya sea a través de supuestos proyectos o directamente sin escalas (a menos que hay andado vendiendo figuritas de Topo Gigio, al estilo del Distrito Federal).
Hace apenas unos días, según nota de El Sur, Zeferino juró, santiguándose ante la imagen del osito Bimbo, que iba a correr sin miramientos a aquellos “jijosdesupinchi”… bueno no lo dijo así, señaló que iba a correr a aquellos funcionarios de su gobierno que se metieran en las campañas políticas sin renunciar a sus cargos. Sin embargo vuelve a quedar claro que en la polaca mexicana se puede decir cualquier cosa, hacer lo contrario y no pasa nada. Ni se ruborizan siquiera los chimoltrufios.
Dicen por ejemplo, que el pasado domingo, 7 de marzo, Armando Ríos Piter, a quien todos señalan como el elegido por Zeferino para sucederlo en la gubernatura, estuvo de visita en algunas comunidades serranas del municipio de Petatlán. Ciudadanos de por aquellos pueblos comentan que llegó por los rumbos de El Zapotillal acompañado por el peor gobernante que ha tenido Petatlán en los últimos 18 años, Tony Armenta Miralrío, quien cobra como delegado de Pesca del gobierno del estado, vaya usted a saber si funge como tal. Y corrió con suerte; de milagro no lo jitomatearon.
Dicen que Ríos Piter arribó a aquellas comunidades con la firme intención de hacer campaña para su santo y de alborotar la gallera contra el alcalde Albino Lacunza y a favor de Tony quien amenaza con regresar en búsqueda de la presidencia y la verdad es que todos los petatlecos claman que regrese… pero lo que se llevó.
Cuentan que Ríos Piter llegó por aquellos rumbos con unas máquinas para rastrear los caminos, según afirman, propiedad estas máquinas, del gobierno del estado de Guerrero que encabeza… ¿quién creen? ¿René Juárez? ¡N’hombre! Que encabeza Zeferino Torreblanca, René ya tiene cinco años que dejó la silla. ¡Quihubo, no que no, Zeferino?
Lo peor de todo es que fuentes bien informadas aseguran que Ríos Piter le soltó 60 mil pesos a los líderes de los campiranos de la sierra para que se trasladaran a Petatlán a reclamarle a Albino Lacunza, el hecho de que, a la fecha, los caminos rurales no hayan sido rehabilitados.
Y los campiranos hicieron su parte. Unos 50 de ellos agarraron sus chivas y se vinieron a hacer turismo político a la cabecera del municipio de Petatleco con billetes presuntamente proporcionados por el consentido de Zeferino, suficientes para aguantar como una semana en plantón. Afortunadamente encontraron al presidente petatleco y luego de una larga reunión los campiranos regresaron a sus comunidades con el compromiso del pronto inicio de los trabajos.
La pregunta es: ¿Habrá en Guerrero autoridades electorales? ¿Existirá todavía la FEPADE? Yo me imagino que no por que en este estado cada pelao hace lo que le viene en gana.