*** Unidad de Ángel Aguirre y alcaldes, buen mensaje para Guerrero.
La reunión celebrada en Casa Guerrero, entre el Gobernador Ángel Aguirre Rivero, y los 81 alcaldes de la entidad, envía un buen mensaje para los habitantes del estado, porque no hay duda, que la suma de esfuerzos es lo que más conviene a un pueblo que está severamente golpeado por la pobreza y la marginación.
Así es. Más allá de los colores partidistas, es bueno que la contienda electoral haya quedado atrás, y que en estos momentos, todos los actores políticos se pongan la misma camiseta: La de Guerrero.
Las estadísticas hablan de rezagos importantes en el terreno social, concretamente en rubros como salud y educación, en donde se requiere de un esfuerzo coordinado de los diferentes niveles de gobierno, en aras de ir revirtiendo esas cifras de la vergüenza.
En la reunión, el gobernador del estado, el jefazo Ángel Aguirre Rivero, entregó apoyos en fertilizante a los 81 municipios, para beneficio de miles de productores de la entidad. Eso habla de que el campo tendrá un lugar especial dentro de su gobierno, por algo, fue el pretexto ideal para lograr esa importante convocatoria. Pero sin lugar a dudas, lo esencial, es que refrendó su compromiso de trabajar con todos los alcaldes, sin distingos y sin preferencias.
Durante el discurso de su toma de protesta, dijo que sería un aliado de los presidentes municipales y hoy lo demostró al llamar a todos, sin exclusiones, dejando en claro que le interesa construir la unidad de todos los Guerrerenses.
Este es un buen mensaje para el pueblo de Guerrero. Y lo es, porque la gente quedó asqueada del gobierno despótico y soberbio que se vivió durante el Zeferinato, en donde nunca se trabajó por construir la unidad de los guerrerenses. Todo giró en torno a una camarilla de amigos, que hoy seguramente se estarán dando la gran vida con las maletotas llenas de dinero.
Se vivió una etapa de distanciamiento entre el pueblo y su gobernante. Los actores políticos, en su gran mayoría, parecían llevarle solamente la corriente al ex gobernador, a efecto de no caer de su gracia, porque la intolerancia era una de sus mayores virtudes.
Hoy la fotografía es completamente diferente. Ahora si se comienza a ver el cambio. De entrada, con un gobernador que está cerca de su pueblo. Y que trabaja con una firme decisión de construir la unidad de los guerrerenses, con un objetivo bien concreto: Darle un jalón importante al estado, en aras de ir ganando la lucha al verdadero enemigo: La pobreza.
Que los 81 alcaldes se hayan reunido con el Gobernador Ángel Aguirre, por donde se vea, es un buen mensaje al pueblo de Guerrero, porque lo que menos conviene a la entidad, es que existan diferencias y enconos entre los políticos. La unidad es lo que puede aportar cosas importantes y buenas para la gente.
En ese tenor, sería mezquino dejar de mencionar el tacto y la habilidad del jefazo Ángel Aguirre, quien evidentemente, ha hecho un trabajo fino e inteligente con los presidentes municipales. No podemos olvidar que la mayoría son priístas, y por ende, contrarios a los partidos que lo llevaron al poder. Es obvio, que el mandatario estatal se ha ganado el respaldo a su proyecto, porque seguramente, les ha dejado en claro, a todos los actores políticos, que no hay dos, ni tres equipos. Que solamente hay uno y se llama Guerrero. Y que éste momento histórico, en él han depositado la tarea de conducir el barco. Esa es la cuestión.
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