El Ayuntamiento de Atoyac está convertido en mercado informal

Eneida Gómez Dorantes

Atoyac , Gro.- En un mercado se ha convertido el ayuntamiento municipal donde venden desde ropa hasta antojitos mexicanos, sin que las autoridades de salud intervengan para que  verifiquen si lo que se  vende en ese lugar cumple con las reglas de salubridad, ya que la ropa que  se vende es usada y las personas que por ahí pasan compran la comida que se expende   cerca del contenedor de basura que está en la intemperie. 
Las personas por necesidad o porque les gusta el comercio, se ponen en los pasillos del ayuntamiento a ofrecer sus productos y así llevar el sustento a  sus familias.

Lo malo de ese comercio informal es que ninguno de los comerciantes que venden en los pasillos del ayuntamiento son verificados por el sector salud y ahora venden hasta ropa usada a bajo precio quienes algunas personas por no contar con recursos económicos compran esa ropa usada a pesar de que estas pueden causar enfermedades de la piel.
Y aunque se buscó al alcalde Carlos Armando Bello Gómez para que diera una explicación del por qué ahora el comercio informal ya alcanzó hasta el ayuntamiento municipal donde se supone que es para hacer trámites de las personas  y no para las ventas, pero las preguntas no tuvieron respuesta por que el alcalde no estaba.
Por lo que se buscó también al director de Reglamentos sin tener éxito ya que debido a que no les pagan sus quincenas la mayoría de los funcionarios ya no acuden a sus oficinas a trabajar.
Al entrevistar a Jacinto Morales Cacho quien es uno de los asistentes al ayuntamiento mencionó que no se había visto eso solo en esta administración,  "no fíjate que no había visto que ahora el ayuntamiento ya es un mercado y desconocemos si le estén pagando pisaje, pero lo que bien es cierto es que no deben de estar aquí se supone que es un Ayuntamiento".
Por lo que pidió al alcalde que si el ayuntamiento se va a convertir en un mercado que cuando menos sean verificadas por las autoridades de Salud por la ropa usada y por la comida de dudosa procedencia, además de que están cerca del contenedor de basura, "viéndolo por el lado amable está bien que se convierta en mercado, cuando menos se ve gente, ya que el ayuntamiento es fantasma, no hay funcionarios y siempre está solo, pues está bien que los comerciantes estén ahí pero que sean verificados por el Sector Salud". Finalizó entre risas.