LA RUEDA DE LA FORTUNA

AMLO. Amenaza? Para los pobres? No!    

Por Alfredo Sarabia

La palabra populismo ha causado escozor en las cúpulas del PRI – Gobierno. Ello se da, a partir de lo dicho por el presidente de la República Enrique Peña Nieto (EPN), al término de su 3er Informe de labores, que aunque no lo dice por su nombre, va con dedicatoria especial a Andrés Manuel López Obrador (AMLO), del cual se ha dicho que va por la victoria en los comicios presidenciales  del 2018. 

Así, ¡EPN, suelta que el populismo es una amenaza! 

Pero en realidad, el populismo es una amenaza? La razón me dice que no, que no es así. Tocante a ello preguntamos: ¿Amenaza para quién? ¿Para los de abajo? ¿Para los de arriba? La respuesta dependerá, de acuerdo a cómo se le mire o bien, desde que posición social o política o económica se juzgue a esa palabra, ya que para el primer grupo de gente de abajo, tiene su concepto de este cuestionamiento que es diametralmente opuesto a la definición de ello que tienen las clases pudientes, que chocan en sí.

Sin embargo, independientemente de todo el rollo que pueda haber en esto, el populismo es una práctica que se viene usando en la política mexicana para la consecución de sufragios para obtener un fin determinado; la utilizan políticos de derecha, de centro o de la izquierda.

Sin embargo, habrá que distinguir entre quienes hacen uso de este recurso, para darse una idea de la magnitud precisa de ese cometido. Una vez identificando el asunto, estaremos en condiciones de valorar la credibilidad o no de la actitud.

Es necesario decir, que hoy en día, hay dos tipos  de populismo: 1) El que se da  desde el PRI- Gobierno y, 2)  Aquel que se da desde personajes de la Izquierda.

Trataremos de desmenuzarlos. 

En el primer caso,  tanto el PRI como el Gobierno y otros partidos de derecha, usn esta práctica desde siempre, con fines nada claros y perversos, pero pensando lascivamente en la obtención del gobierno sin importar los medios que se gasten la perfidia. 

Una característica notable de ello, ha sido la falta de congruencia, aunado a las descalificaciones que se realizan inescrupulosamente a través de los diferentes medios informativos que mantienen bajo sus órdenes, así como también el encubrimiento del término “populismo” cuando se trata a gente adinerada: Fobaproa es ejemplo de lo anterior, pues el gobierno utilizó las palabras “rescate bancario” para justificar la perversidad que aún seguimos pagando, pero en realidad, a eso podríamos llamarle populismo, pero al no tratarse de gente pobre, se le dio en llamar pomposamente, rescate bancario. 

Igualmente, se tienen a los políticos priistas, usar discursos electorales llenos de populismo ramplón venenoso, discursos huecos y vanos, pero jamás con pensamientos cargados verdaderamente. 

¡Esto si es populismo! ¡Prometer y  no cumplir! ¡Esto si es dañino!

En el segundo caso, la congruencia que se da en una situación, no podría jamás llamársele populismo, a menos que la mala fe y la mala leche, acompañen perversa y dolosamente este término. 

Debes saber, que se ha demostrado esa congruencia pregonada, y es esa razón a la que tanto se le teme. Por tanto, AMLO representa para los del PRI y demás caterva de bribones, de nueva cuenta el enemigo a vencer, antes lo hizo Fox, luego  Calderón y ahora, Peña Nieto….HASTA LA PRÓXIMA.