MEMORÁNDUM

*** ¿Quién piensa que la violencia es el camino?

Gerardo Ruano Cástulo

Era un grupo numeroso de inconformes. Llegaron a ver al maestro, para pedirle que les apoyara en su lucha. Estando frente a él, le dijeron: “Nuestra lucha es justa. ¡Apóyanos maestro! Hay mucha pobreza por todas partes. Nos duele la pobreza. Nuestra gente sufre de hambre”. El plan era ir a una guerra.

El maestro escuchó y se mantuvo en silencio. Ni una sola palabra. Entonces, alguien le gritó: “¿No te duele la pobreza en que nos tienen? Si tienes una razón para luchar o vivir, ¿Dinos cuál es?”.

Luego de esto, el maestro expresó: “Si me duele la pobreza y mi propósito de vida, es precisamente avanzar para vencer a la pobreza”. Al escuchar esto, le cuestionaron: “Si es así, ¿Por qué no vienes con nosotros?”.

La respuesta del maestro fue: “Porque mi trabajo, es para vencer la pobreza, pero la pobreza, de quienes aún piensan, que con la violencia se pueden mejorar la cosas”. (Del taller de la imaginación de Juan Francisco R.).

Efectivamente, es de locos creer que la paz llegará al mundo por medio de las armas. Es evidente, que el despliegue militarizado en países asiáticos, donde se encuentran los más grandes yacimientos de petróleo del mundo, son más producto de la ambición y el ansia de poder, que el deseo de ver un mundo en armonía.

Bien se dice, que la violencia, lo único que genera es más violencia. Es reprobable, que en nombre de la paz, se ordenen masacres. La guerra ha resultado ser uno de los mejores negocios. Eso, más que el medio para llegar a la paz.

En el ámbito nacional, en plena era de las comunicaciones, es lamentable, que la incivilidad siga imperando. La facilidad con qué hoy llega la información a la gente, implica que nos pongamos al nivel de los cambios. En otras palabras, que demos el gran salto de evolución. No se concibe, que en pleno siglo XXI, aún se siga pensando en la violencia como el camino para generar los cambios.

¿Qué pasó con aquél que golpeó la dignidad de las nobles maestras, a quienes rapó de la cabeza? La voz, en redes sociales fue unánime. Se perdió el sentido de lo humano. La irracionalidad por encima de todo y de todos. El acto fue sumamente reprobado.

Existe hoy una red magnifica que nos mantiene enlazados e informados. ¿Qué falta para que los cambios los generemos sin violencia? La respuesta es muy sencilla: Educación para evolucionar. Curiosamente, algo en lo que pudieran incidir, quienes apuestan a actos vandálicos, bloqueos y manifestaciones. Más sin embargo, siguen viviendo su revolución, cuando los de hoy, son tiempos de evolución.

Lo ocurrido en Oaxaca, es una muestra de nuestro grado de atraso y pobreza para poder resolver nuestras diferencias. Ya no vivimos en tiempos de Huitzilopochtli para seguir ofrendando sangre. Ya no.

EN OTRO ÁMBITO, buen aporte realiza Omar Salazar Flores, desde que llegó como jefe administrativo del Hospital de la Madre y el Niño Guerrerense de la capital, por sus siglas HMNG. Su mano se ve en obras y mejoramiento del servicio. La buena atención a la gente es prioritaria, así como mantener todos los niveles de calidad que distinguen a la Institución.

Omar Salazar ha dado muestras, en el corto tiempo, que es un político de trabajo y gran compromiso social.

Mejor aún, conserva los pies sobre el piso, aportando para la armonía laboral y el buen trato a la gente. Buenos puntos para Omar Salazar. Esa es la cuestión.