LA RUEDA DE LA FORTUNA

Hacerle al tío lolo en el PRI

La política que está siguiendo el PRI, acerca de impugnar la elección pasada, nos indica que aún no termina de rumiar su fracaso electoral. Son casi 160 mil votos de diferencia entre Aguirre Rivero y el candidato perdedor Manuel Añorve Baños; tanto para mi, como para muchos guerrerenses eso que hacen, es nomás hacerse los tíos lolos, ya que la diferencia anotada anteriormente es enorme, inimaginable e inconcebible para los priístas encumbrados, pero lo suficiente como para ni pensar hacer lo que están ridículamente haciendo.

Hablan de guerra sucia, de elecciones sucias por parte de la coalición Guerrero nos Une,  y no se que tantas cochinadas más que ocurrieron durante el proceso electoral, lo que demuestra que esos dirigentes priístas, en las que por supuesto está el representante del tricolor ante el Instituto Electoral del Estado de Guerrero (IEGG) Roberto Torres, que si no fuera cierto, creería que es un chiste de mal gusto, pero la realidad de las cosas es que el PRI está impugnando los resultados de las elecciones. A quien quieren engañar estos simuladores, cuando todos los guerrerenses fuimos testigos de cómo se las gastó el candidato de ese otrora poderoso PRI. Han de creer estos especímenes priístas que los ciudadanos de abajo nos estamos chupando el dedo o que de plano somos de lo más ignorantes como para que creamos en las tarugadas que inventaron, que les creamos las patrañas y mentiras que continúan tirando. Por ejemplo, el conteo de los votos que pidió, recientemente, el Tribunal Electoral Federal (TRIFE), se lo echó abajo, pero dicen que se van a ir más arriba con sus tarugadas, o sea que van a seguir haciéndose los tíos lolos. Y  se fueron de paso con su inconformidad, ahora pretendieron echar abajo toda la elección de gobernador y vuelta para atrás. El lunes 14 para amanecer el 15, el Tribunal Estatal Electoral (TEE) el PRI  volvió a fracasar en su intentona patéticamente buscada.
Señores dirigentes del PRI, la elección ya terminó desde el momento que se dieron a conocer las cifras oficiales despierten a la realidad. Todos supimos del gran abismo electoral entre los candidatos del PRD  y el del PRI, para que le hacen al pendejo, mejor pónganse a trabajar con la gente, pónganse a chambear pero en serio, ya vieron que la simulación, la mentira y el embuste, solo duran muy poco, pero no lo suficiente como para alcanzar la victoria final, para que no le apuesten a repartir despensas y otras fregaderas en pos de los triunfos electorales.  Ángel Aguirre Rivero ganó y triunfó con muchos votos de diferencia que hasta el más ciego podría ver, pero que extrañamente los dirigentes priístas se niegan a observar, pero allá ello; lo que no lograron en las urnas, lo quieren alcanzar en la mesa. ¡Así no es el juego democrático señores!
Sin embargo, en el PRI están en todo su derecho de seguirse haciéndose como el tío lolo, imposible evitarlo….HASTA PRONTO.